lunes, 19 de agosto de 2013

Recomendación del libro "El optimista racional"

Libro: el optimista racional. ¿Tiene límites la capacidad de progreso de la raza humana?
Autor: Matt Ridley
Matt Ridley, es muy conocido por ser el autor del libro “Genoma”, un tema muy a modo para un zoólogo como es su caso. Lo que parece ser un poco raro es que un biólogo publique un libro sobre economía; pero cuando uno se da cuenta que él es parte de la junta directiva de un banco en Inglaterra, entonces uno entiendo porque lo escribe y porque sus ideas son tan claramente de “derecha”.
Esta posición política le hace escribir un libro que sirve para pelearse sobre casi todos los tópicos polémicos que existen en la actualidad: los transgénicos (argumenta que no existe evidencia científica comprobada de que sean malos para la salud y hoy en día alimentan a una gran parte de la población mundial), el carácter egoísta y competitivo del capitalismo (cita los estudios sobre economía conductual y neuroeconomía que exploran la necesidad de confiar en los demás para realizar transacciones económicas), las ciudades (asegura que el mejor lugar para vivir son en ellas y no en un bucólico remanso de la pradera), el petróleo y las energías alternativas (está en contra de las energías alternativas por caras y sucias, dice que no son nada verdes y que la mejor opción que se tiene es seguir con el petróleo, gas y carbón hasta que se agoten, para posteriormente pasar a la energía nuclear) y claro, no podía dejarlo de lado, el calentamiento global (asegura que es una exageración y aunque se presentara el peor de los escenarios habría formas de superarlo, por no decir que sus efectos no serían tan problemáticos como se asegura).
Pero en realidad no es de eso de lo que quiso hablar, sino de que el gran motor de la evolución humana ha sido la especialización y el intercambio; en sus palabras dice que “el intercambio hizo a la evolución cultural acumulativa y a la inteligencia colectiva”; este progreso ha tenido y va a tener obstáculos, pero argumenta que la mejor forma de haberlos resuelto y de resolverlos a futuro es permitir que los individuos se organicen para seguir intercambiando objetos que los demás deseen.
En general me pareció muy bueno el libro, sólidamente documentado y relativamente bien argumentado, aunque hay secciones en que especula más de la cuenta, sobre todo en sus explicaciones del pasado. Lo recomiendo para todos aquellos que nos encanta la polémica.